Oraciones personales. Son aquellas que tienen un sujeto reconocible, que puede estar presente en la oración o ser tácito. Por ejemplo: Mi comunidad come lentejas los jueves

Personales o impersonales: las personales poseen sujeto. Las impersonales, no. El verbo en las impersonales se encuentra en tercera persona del singular. Hay tres grupos de oraciones impersonales:

Sus oraciones sinceras y llenas de Convicción le permitieron padecer el consuelo y la fortaleza de Dios en medio de los desafíos.

Señor, confío en tu favor, en tu Humor y en tu misericordia para conmigo, ayudame a soportar este momento y esperar en ti, hasta que la sanidad llegue por completo y pueda retornar a mi vida corriente.

Padre ayúdalo a tener una Confianza inquebrantable a pesar de las dificultades por las que esta atravesando y que aunque los exámenes médicos digan cosas malas, él permanezca en la Certidumbre de tu amado hijo, creyendo que tu eres capaz de sanarlo.

«et in terra pax hominibus bonae voluntatis»: «y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad». Esta frase deje de la paz que Dios ofrece a aquellos que tienen buena voluntad y que buscan seguir su camino.

pero ese Disección semánticamente simplista ha sido desaseado en sintaxis moderna, entre otras cosas porque no aclara la estructura interna, no permite hacer generalizaciones interesantes y parece ignorar las evidencias que llevaron a la hipótesis de endocentricidad generalizada. Además el esquema “sujeto + predicado” no puede explicar oraciones interrogativas como:

«La oración cristiana no es una forma para estar un poco más en paz con uno mismo o encontrar alguna Amistad interior; nosotros rezamos para llevar todo a Dios, para encomendarle el mundo»

Las oraciones simples son las que tienen un solo verbo en su estructura, como en Marta llegó pronto a la reunión o en Le encanta la comida del nuevo restaurante mexicano

Y al orar, no hablen solo por departir como hacen los gentiles, porque ellos se imaginan que serán escuchados por sus muchas palabras.

La oración para los enfermos es un acto de simpatía y de fe, que nos acerca a Dios y a los que sufren. La oración para los enfermos no es una forma de escapar de la efectividad, sino de enfrentarla con esperanza.

Bendícelos a todos y haz que muchos vuelvan a encontrar la Lozanía, que su Confianza crezca y se vayan abriendo a las maravillas de tu amor, para que asimismo ellos sean testigos de tu poder y de tu compasión.

Imploro que cubras a los enfermos con tu manto para que logren recuperarse y siempre estén protegidos de todo mal y peligro bajo tu cuidado.

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